Este tutorial es super hiper sencillo, se trata de cómo podemos obtener un polvo iluminador suelto, que deje nuestra piel con un precioso acabado satinado. Para esto necesitamos simplemente tomar las sombras nacaradas, blancas y brillantes que usualmente tenemos en desuso o en excesiva cantidad, además de una paleta pequeña, borde de pincel, etc. que sirva para removerla de su contendor original y un envase con tapa para que podamos almacenar nuestro topísimo iluminador.
En mi caso utilicé sombras chinas de paletas varias que tenía guardadas, las cuales tienden a soltarse demasiado para usar de sombra y al moverlas se van manchando entre ellas, no obstante los colores son lindos y pigmentados. Una vez estuve con todas las paletas sobre la mesa, las limpié suavemente con un pincel de polvos para que no quedaran restos de otros tonos, y luego las removí con la parte de atrás de un pincel y finalmente las puse en una superficie donde las piqué y revolví hasta soltar totalmente el producto y producir un iluminador prolijo, el cual almacené apropiadamente, tal y como se ve en la foto.
Para probar el resultado, con una brocha grande, de rubor o de polvos me apliqué una pasada por el dorso de mi mano, la cual quedó iluminada con destellos en un tono nacarado.
Estoy muy contenga con mi iluminador casero, tengo una gran cantidad y se puede aplicar en las sienes para contornear el rostro, en los brazos, piernas, etc, y te dejará un acabado completamente satinado y precioso, que se ve bien con flash o a luz natural, ideal para resaltar en estas fiestas.
Saludos y que tengan una excelente semana =)
No hay comentarios:
Publicar un comentario